VENDIMIA

Hemos vendimiado manualmente la mañana del 2 de septiembre del 2020, día fruto del calendario biodinámico. Lo hemos hecho en cajas de 20 kg para proteger la uva hasta la llegada inmediata a la bodega.
Previamente habíamos seleccionado las cepas, hilera por hilera según los controles de maduración y en base a los parámetros enológicos de azúcar, acidez, pH y cata de uva.

VINIFICACIÓN

Una vez la uva ha entrado en la bodega, la hemos despalillado y la hemos puesto en la tina con sus pieles y semillas. Hemos controlado la fermentación a baja temperatura y hemos adecuado los remontados para extraer el color y los taninos que ahora encontramos en el Bergonyó i Durall-Musc.
Una vez terminada la fermentación alcohólica, hemos trasegado el vino sin prensar a barricas de madera de roble americano donde ha hecho la fermentación maloláctica. Hemos hecho crianza en las mismas barricas durante 6 meses y una vez pasado este tiempo lo hemos trasegado a tina de inoxidable hasta su embotellado. En botella ha seguido haciendo crianza y afinamiento hasta el invierno de 2023.
El vino no ha sido estabilizado, clarificado ni filtrado, por lo que puede contener sedimentos naturales. Con esta elaboración cuidada y con la mínima intervención hemos querido mantener el máximo potencial sensorial del vino.

NOTA DE CATA

Es un vino límpido y de capa alta. Tiene color de cereza picota con tonalidades granates y presenta una lágrima homogénea y marcada.
Muy expresivo en nariz, a copa parada muestra aroma a violetas del bosque y frambuesa, y presencia de notas de chocolate y café. Cuando agitamos la copa, se genera un amplio abanico aromático donde aparecen las vainillas y el coco de la crianza en barrica así como los toques de fruta negra como la grosella y de ciruelas maduras.
En boca se muestra complejo, intenso y redondo, con una acidez equilibrada y buena presencia de taninos. Mantiene los sabores de fruta negra bien madura y aparecen unos suaves toques ahumados. Tiene un final largo y persistente.

MARIDAJE

Por su intensidad y cuerpo, armoniza con la cocina tradicional, como asados, setas y platos de larga cocción y horno.
Muy buen acompañante de tablas de quesos y embutidos.
Excelente con chocolate de cacao puro, donde se intensifica la fruta negra y persisten los toques ahumados.