VENDIMIA
Hemos vendimiado manualmente la tarde del martes 3 de septiembre de 2019, día flor del calendario biodinámico. Lo hemos hecho en cajas de 20 kg para proteger la uva hasta la llegada inmediata a la bodega.
Previamente habíamos seleccionado las cepas, eligiendo las hileras óptimas según los controles de maduración y en base a los parámetros enológicos de azúcar, acidez, pH y cata de uva.
VINIFICACIÓN
Una vez la uva ha entrado en la bodega, la hemos despalillado y la hemos puesto a macerar en el depósito con sus pieles y semillas. Hemos controlado la fermentación a baja temperatura y hemos adecuado los remontados para extraer el color y los taninos que ahora encontramos en el LLebrec.
Una vez terminada la fermentación alcohólica, hemos trasegado el vino, sin prensar, a depósitos de inoxidable donde ha hecho la fermentación maloláctica y ha descansado hasta su embotellado a finales de primavera.
Este vino no ha sido estabilizado, clarificado ni filtrado, por lo que puede contener sedimentos naturales. Con esta cuidada elaboración y con la mínima intervención hemos querido mantener el máximo potencial sensorial del vino.
NOTA DE CATA
Vino límpido y de capa media. Tiene color cereza con tonalidades violáceas y presenta una lágrima homogénea y marcada.
Muy expresivo en nariz, a copa parada muestra fruta roja como la fresa y las cerezas sobre un fondo láctico originado durante la fermentación maloláctica. Cuando se airea, se genera un abanico aromático donde aparecen además frutas del bosque.
En boca se muestra franco y fresco, con una acidez equilibrada y buena presencia de taninos. Mantiene los sabores de la fruta roja bien madura y aparecen notas de cacao. Tiene un final largo y persistente.
MARIDAJE
Por su frescura y fruta roja, armoniza con una gran variedad de carnes incluyendo las hechas a la brasa.
Realza con respeto y elegancia los platos de pescado.
Maridado con fresones se intensifica la fruta roja que lo caracteriza.